Legalismos
Si lo primero que encuentras de tu proyecto en un buscador web son los legalismos:
… empieza a preocuparte: estás viviendo en el siglo pasado. ActualÃzate.
El sitio de Pablo Rodríguez Madroño
Si lo primero que encuentras de tu proyecto en un buscador web son los legalismos:
… empieza a preocuparte: estás viviendo en el siglo pasado. ActualÃzate.
Ya hace unas cuantas semanas que tengo en casa un bonito netbook: un Asus EEE-PC 901 blanco. Me costó muy poco dinero (199€ en uno conocido establecimiento de informática, música y libros), y aunque es limitado en recursos permite una portabilidad muy grande: pesa poco más de 1 kilo y tiene una autonomÃa cercana a las 4 horas.
El EEE-PC 901 viene con dos discos de estado sólido: uno más rápido de unos 4 GB, y otro no tanto de 12 GB (en la versión con Windows) o de 16 GB (en la versión con Linux). Inicialmente está equipado con 1 GB de RAM, pero por el bajo precio de los módulos es muy conveniente pasarlo a 2 GB.
Este modelo en particular venÃa preinstalado con Linux, y gracias a eso disponÃa de un espacio algo mayor en disco. Sin embargo, encontré que el rendimiento no era el esperado. Además, el disco de 4GB estaba al borde del colapso, y disponÃa de varias particiones ocultas que agravaban el problema. Todo ello hacÃa muy difÃcil, si no imposible, instalar otras aplicaciones.
Como actualmente mis necesidades informáticas pasan por tener que utilizar Office (no la semi-conversión que hace OpenOffice, sino caracterÃsticas un poco avanzadas como revisión de cambios, comentarios y similares), probé a instalar Windows XP, pensando que serÃa una locura y acabarÃa con un ladrillo inutilizable.
Al final, después de trastear durante varios dÃas (literalmente) he conseguido dejar muy afinado el sistema. El rendimiento no es alto, pero teniendo en cuenta que el procesador es humilde y no es un equipo para castigarlo, creo que llega a un nivel espectacular. Además, utilizando el iPhone como módem 3G tengo una estación de trabajo ultraportátil…
El truco es configurar bien el sistema operativo y las aplicaciones para que haya un espacio libre razonable en el disco pequeño y a la vez se puedan instalar las aplicaciones deseadas. Existen unas cuantas guÃas para trucar el sistema, pero en resumen esto es lo que se puede hacer:
Gracias a estas operaciones dispongo de algo más de 1 GB libre en el disco de 4 GB, lo que deberÃa ser suficiente para no tener problemas de ningún tipo.
Con todo esto tengo la impresión de haber convertido un equipillo de utilidad dudosa en una máquina que me puedo llevar tranquilamente a una visita de trabajo, a un viaje o a cualquier otro lugar.
Me duele decirlo, pero esta vez Windows XP ha ganado en rendimiento a Linux…
En el nuevo iMac querÃa tener instalados Mac OS, Windows y Linux, pero debido a extraños fenómenos en las tablas de particiones mixtas (se utiliza GPT como tecnologÃa más avanzada, pero simultáneamente con MBR para preservar la compatibilidad) he tenido que renunciar a ello.
He conseguido dejar todo instalado más o menos a mi gusto:
En realidad no es complicado, sino que únicamente se debe seguir un cierto orden a la hora de particionar e instalar. Se debe empezar con una única partición con Mac OS porque se utiliza BootCamp:
¡Y ya está! ¿Qué pasó con Linux? Pues tendré que virtualizarlo, pero eso no es ningún problema. En Parallels el problema es que la última versión está del todo soportada, pero arranca y se puede trabajar. Además, desde MacOS se puede virtualizar el sistema Windows instalado en la partición de BootCamp…